Archive for the ‘Investigacion’ Category
La responsabilidad social del científico
¿Cuál es la responsabilidad que el científico tiene con su narrativa de la realidad?, ¿cómo de responsable hemos de ser con nuestras palabras? Que las palabras, los conceptos, las teorías y las preguntas no son neutrales ni inofensivas… bueno, eso está claro, pero es fácil que se nos pase por alto en el día a día. Hace unos meses me pidieron un texto que aparecerá con las actas del Congreso del OCS de 2006 (Observatorio para la CiberSociedad). Aprovecho para publicar una parte del texto al hilo de las encendidas discusiones de la última semana (y que aún continúan, con punzantes intervenciones y réplicas, JJ me decía que es un debate singular por el cruce de enlaces desde blogs tan diferentes, quizás va a ser esa el mejor de los resultados de la mesa). Es un fragmento de lo que será el capitulo de un libro donde trato pergeñar cuál es en mi opinión la responsabilidad social que deben asumir los científicos dedicados al estudio de Internet (algo que por otro lado puede aplicarse a cualquier otro). La responsabilidad que tienen por lo que dicen, o por lo que se dejan sin decir. El texto es largo, academico, es una pienza de posicionamiento personal, que desde luego se sale del ConTexto, pero de tanto en tanto uno neceista reafirmar su identidad, de manera que podéis darle al ‘leído’ en vuestro agregadores, y punto. Un fragmento para abrir boca:
El problema es que quizás esa misma alucinación consensuada que comulgó acríticamente con el discurso promovido por los gurús, evangelistas e ingenieros de Internet, vuelve a caer prisionera, otra vez acríticamente, de conceptos como el de Web 2.0, inteligencia colectiva, redes sociales o software social, entre otros.
Las TIC siguen fascinando. Basta seguir la actualidad u ojear la prensa para darse cuenta de ello. Si hace 12 años la revista Time nombró personaje del año al ciberespacio (antes había nombrado al PC), en el año 2007 es el usuario de Internet: ‘You’, como tituló en su portada: “tu eres el personaje de este año”, decía una frase bajo la imagen de un computador que representaba a las legiones de usuarios de Internet que contribuyen a su construcción mediante la publicación de sus imágenes, videos, textos, etc. Esta fascinación captura el interés de los ciudadanos y la imaginación del científico.
Caemos subyugados por metáforas y conceptos similares a las que ya antes se habían manejado (comunidad, virtualidad, etc.) y que ahora vuelven a fascinarnos: Web 2.0, comunidades participativas, software social, etc. conceptos que se adueñan de los foros académicos sin que se elabore una discusión crítica sobre ellos. No se trata, en este caso, de que los científicos sociales opten por esa teatralización del distanciamiento con su objeto de estudio que tan fundamental resulta al positivismo, porque sabemos que es una ficción. Se trata, en cambio, de adoptar una actitud que ha de indagar en las fuentes de tensión que en mucha ocasiones permanecen en la penumbra y que los actores no desean exponer. Se trata de ser capaces de descubrir, analizar y exponer públicamente los conflictos que permanecen soterrados y que tienden a la invisibilidad y a la naturalización. Y hacerlo porque nuestras sociedades deben conocer esas tensiones. Esa es una de las ineludibles responsabilidades que el científico tiene con la sociedad que lo acoge. Read the rest of this entry »
Saldando cuentas
Ahí van un montón de razones por las cuales he dejado de escribir en las úlitmas semanas, y más que excusas, quizás a alguien pueda interesarle alguna de ellas:
- Estalella, A., Ardèvol, E., & Gómez, E. (2007, 2-3 November). Media as practice: Introducing symmetry on the ethnographies of the Internet. Paper presented at the Digital Media: European Perspectives Workshop, Sussex.
- Ardévol, E., Estalella. A. y Domínguez, D. (coordinadores), La mediación tecnológica en la práctica etnográfica Simposio del XI Congreso de Antropología FAAEE (PDF), 10-13 de septiembre de 2008, San Sebastián.
- Domínguez, D., Beaulieu, A., Estalella, A., Gómez, E., Schnettler, B., & Read, R. (2007) (editores) Etnografía virtual, monográfico, 8 (3) Forum Qualitative SocialResearch (FQS).
- Domínguez, D., Beaulieu, A., Estalella, A., Gómez, E., Schnettler, B., & Read, R. (2007). Virtual Ethnography. Forum Qualitative Social Research, 8(3).
- Estalella, A., & Ardèvol, E. (2007). Ética de campo: hacia una ética situada para la investigación etnográfica de internet. Forum Qualitative Social Research, 8(3).
- Gómez, E., Ardèvol, E., & Estalella, A. (2007, 17-20 october). Playful embodiment and identity performance on the Internet. Paper presented at the Internet Research 8.0: Let’s Play, Vancouver.
Aparte de eso, algún suelto por ahí: ‘Los usuarios se rebelan contra las normas de la Web 2.0’, y ‘Blogs, urinarios y web 2.0: caminando por el filo de la navaja‘, un artículo que me comprometí a escribir hace unos meses para la revista electrónica BIT que edita la asociación La Espiral, dedicada a temas relacionados con la educación y las nuevas tecnologías. Lo acaba de publicar, se titula: Blogs, urinarios y web 2.0: caminando por el filo de la navaja. Aunque aún más interesante es la experiencia que Isabel Capdevila relata en ‘De cómo lo virtual se hizo real (el poder transgresor de la red)’.
Un proyecto llamado Projecte3* que montaron en su instituto, el IES Joanot Martorell, que comenzó con la producción de un wiki, que por azares del destino desembocó en el desembarco de un contenedor en el instituto y que ha terminado en la creación de un aula virtual en el meta-per-verso Second Life.
Me parece tan interesante que acabo de cursarle una invitación para que venga a contarnos el proyecto al sarao que preparamos para el 18 y 19 de diciembre en Madrid, WikiST, con la gente del Medialab-Prado, de Madri+d, y por supuesto, con mi mentor oficioso, que acaba de publicar libro: El carnaval de la tecnociencia.
Bueno, ahí va el arranque de Blogs, urinarios y web 2.0…:
Los blogs y la llamada Web 2.0 con la que se engloba a toda una serie de tecnologías (wikis, blogs, sistemas de folksonomías, etc.) ofrecen a los ciudadanos la posibilidad de participar en la cultura y convertirse no sólo en consumidores sino en productores de contenidos. De manera que un ciudadano puede ejercer de periodista desde su hogar: sólo necesita un blog, una conexión a Internet, un ordenador, una cámara digital y… poco más.
[…]
Pero… un momento, un momento. ¿Realmente se sostiene esa visión utópica tan a menudo aireada cuando hablamos de Internet y de las tecnologías de Internet? sigue
La UE: a por la Open Science
Las autoridades europeas lo dicen bien claro. Están convencidas de promover la open science. Es decir, apostar por modelos de publicación y distribución del conocimiento en abierto, en revistas con derechos de autor limitados, que permitan el acceso a sus contenidos y su posterior distribución.
Eso es la recomendación hecha a la Comisión Europea (Scientific Publciation: Policy on Open Access, PDF)por uno de sus departamentos (European Research Advisory Board) y el mismo European Research Council (Statement on Open Access, PDF; me lo envió Ignasi Labastida hace poco, de CC España, y Antonio Lafuente lo comenta también). Entre otras medidas se propone que por ejemplo las investigaciones que se subvencionen con dinero público estén obligadas a publicarse en abierto, como ‘open access’. Se trata de adoptar nuevos modelos de publicación, distribución y acceso al conocimiento científico. Pero eso no es una cuestión que afecte únicamente a los derechos de autor, sino que lleva a una transformación de todo el modelo de revisión por pares, sometido a una crítica constante desde hace ya unos años (y como muestra un reciente artículo, vía Julen: Publish and perish: why the current publication and review model is killing research and wasting your money). Que un trabajo sea ‘open access’ significa que:
1) Los autores o los titulares de derechos de autor garantizan a todos los usuarios la posibilidad irrevocable de acceder a los trabajos, copiarlos, distribuirlos, transmitirlos y representarlos públicamente y hacer obra derivadas en cualquier
medio digital y con cualquier objetivo, manteniendo, eso sí, la atribución al autor. Se garantiza también el derecho a hacer un pequeño número de copias impresa para uso personal.2) Una copia del trabajo y todo el material suplementario será publicada en al menos un repositorio online que sea mantenido por una institución académica que promueva el open access
Las razones para adoptar este tipo de medidas son múltiples. Una de ellas económica. Los precios de las revistas especializadas crecieron un 300% (inflación ya descontada) entre 1975 y 1995. Pero además el modelo es perverso: “public funding bodies are currently effectively paying 3 times for research: (i) firstly for the research itself to be conducted; (ii) secondly, for the peer review; and (iii) finally for the library subscription to the journal in which the paper is published”.
Es decir, un absurdo contra el que hay que poner remedio. No será sencillo. Pero la única opción, eso está claro, es que las instituciones políticas tomen cartas en el asunto.
Para los ‘agnósticos’ en esta temática, unos datos de la investigación Citation
Advantage of Open Access Articles, de Gunther Eysenbach, donde se compara Las ventajas de publicar en revistas con las restricciones del copyright y en otras abiertas que permiten la copia y distribución de sus contenidos. Los resultados son abrumadores:
- Pasados entre 4-10 meses de la publicación, los artículos publicados en una revista abierta (copyleft) son citados el doble de veces, por término medio, que los otros (publicados en revistas cerradas con que mantienen las restricciones del copyright)
- Pasados entre 10-16 meses de la publicación, los artículos publicados en una revista abierta (copyleft) son citados tres veces más, por término medio, que los otros (publicados en revistas cerradas con que mantienen las restricciones del copyright)
Ya sabes, si eres científico publcia en copyleft. Si queréis seguir el tema, Antonio Lafuente es la referencia ineludible, Julen Iturbe es otra buena fuente y Daniel Domínguez también.
El informe elaborado en 2006 por organismos de la Comisión Euroopea: Study on
the economic and technical evolution of the scientific publication markets in Europe.
Una recopilación de documentos importantes sobre el tema en
mi delicious: Documentos sobre Open Science, Open Access y críticas al sistema de Peer Review.
Asegurando la calidad de la ciencia (¿Web 2.0?)
Antonio Lafuente escribe en tecnocidanos un interesante artículo sobre la crisis del peer review. El modelo sobre el que sustentan las publicaciones científicas en la actualidad. EL punto en cuestión es que el modelo es insuficiente para asegurar la calidad de los resultados de investigación. Bien por incapaciadad de las revistas, que no pueden comprobar todo lo que se afirma en un artículo o bien por los vicios de los implicados: autores que falsean los datos, editores que interesadamente rechazan artículos, etc. Quienes estamos comenzando nuestra carrera de investigación, como res mi caso, no hemos sufrido en nuestras carnes las injusticias de este sistema. pero he escuchado a muchos investigadores hablar de ellas. De lo que no cabe duda es de la necesidad de algçun mecanismo de selección y de filtardo del conocimiento.
Si el peer-review no es suficiente, ¿entonces qué?, ¿cómo aseguramos la calidad del conocimiento?
Una propuesta es el uso de tecnologías que quizás pueden contribuir a generar nuevas formas de autoridad, mayor transparencia, apertura en los procesos de sanción del conocimiento, etc. Sobre esto justo estamos preparando unas jornadas en Madrid para noviembre, centradas en blogs y wikis (críticas y sugerencias serán bienvenidas).
Antonio señala algunas iniciativas, como la de Philica, una revista “que está experimentando con un modelo de peer review que es transparente (a la vista de todos), dinámico (admite que las opiniones puedan modificarse con el tiempo) y deseditorializado (se publica antes de la revisión)”.
Interesante, tanto como la de PlosONE, que “aparecerá en noviembre de este año incorporando algunas novedades de interés. Entre ellas que la revisión de los papers continuará después de publicados, pues los lectores podrán insertar comentarios y los autores las réplicas o rectificaciones que consideren oportunas”.
Interesante y recomendable artículo.
Nuevo blog sobre investigación: Somia
Como ya habéis visto, cambié el diseño de mi blog. Creo que ha mejorado. El diseño se llama Simpla, es obra de Phu Ly, un desarrollador/a que vive en Londres, según cuenta en su web. Gracias Phu Ly.
Estoy actualizando ‘a poc a poc’ el blogroll. He incluido algunos artículos sobre el copyleft que he escrito en los últimos años y he licenciado los contenidos del blog con una licencia Creative Commons de tipo ‘Reconocimiento-CompartirIgual’, que significa que pueden copiarse, distribuirse e incluso modificarse y usarse con ánimo de lucro siempre que se mantenga la atribución del autor (un servidor) y siemopre que la obra derivada tenga la misma licencia.
Y acabo de abrirme otro blog. Somia: Investigando lo digital (http://somia.wordpresss.com), donde trataré temas aburridos: cuestiones metodológicas de la investigación de Internet, etnografías del ciberespacio, problemas teóricas de la investigación de Internet, ciercultura, etc.
Si eres científico: publica en abierto (copyleft)
Si trabajas en la investigación, más vale que te tomes muy en serio Internet para la difusión de tus resultados, y muy importante: que te tomes en serio lo de publicar en revistas abiertas que permiten la libre difusión de sus contenidos.
Un trabajo realizado por Gunther Eysenbach y titulado Citation Advantage of Open Access Articles (en la PLoS Biology) compara las ventajas de publicar en revistas con las restricciones del copyright y en otras abiertas que permiten la copia y distribución de sus contenidos. Los resultados son abrumadores:
- Pasados entre 4-10 meses de la publicación, los artículos publicados en una revista abierta (copyleft) son citados el doble de veces, por término medio, que los otros (publicados en revistas cerradas con que mantienen las restricciones del copyright)
- Pasados entre 10-16 meses de la publicación, los artículos publicados en una revista abierta (copyleft) son citados tres veces más, por término medio, que los otros (publicados en revistas cerradas con que mantienen las restricciones del copyright)
Yo escribí en su momento en el Ciberpaís sobre estos modos de publicación que Creative Commons está promoviendo con Science Commons su y de los que la Public Library of Science (PLoS) se ha convertido en referencia ineludible.
Popular versus verdadero, en Menéame y más allá
¿Cómo medir lo verdadero?, especialmente en Internet. Aunque habría que partir de que lo ‘verdadero’ es una palabra que sólo cabe en los templos (de cualquier religión) ya que son los únicos que tienen acceso a las esencias y a las verdades. Dejando esto al margen, la cuestión de lo verdadero, lo real, lo veraz, lo valioso, lo verificable… es un tema recurrente en la mayoría de proyectos de Internet dedicados a la producción de información y conocimiento (blogs, Wikipedia, Meneame, etc.).
José Antonio del Moral, de Alianzo, escribe un artículo interesante sobre Menéame (‘Por qué me gusta y me disgusta Menéame’), Ricardo le responde, en el que señala las limitaciones de un sistema basado en el voto de sus usuarios:
el algoritmo de Menéame y el de Digg todavía no son perfectos. Les hace falta una vuelta de tuerca. Por ejemplo, Matt McAlister hablaba recientemente del riesgo de que algo falso se convierta en cierto por el simple hecho de que muchos, que pueden estar perfectamente organizados, lo voten o de que muchas cosas interesantes se queden fuera si no gustan a la mayoría.
La cuestión es que lo que encontramos en Meneame, y en otros sitios, no debe identificarse con lo verdadero, sino con lo popular. La diferencia es radical. Esto no significa tender una duda de sospecha sobre todo lo que encontremos en Meneame, pero sí permite establecer una clara distinción.
Ahora bien, esa debilidad de Meneame es la misma que la de cualquier otro sistema de información. Hace poco Efe distribuía una foto falsa que El País y otros medios publicaban. Más de un millón y medio de personas vieron el domingo al comprar el periódico. Todos confiamos en El País, y en Efe, y bastó no un centenar de personas para convertir esa foto en ‘verdadera’, sino una sola.
Creo que lo interesante no es pensar en cuestiones de certeza o incerteza, o verdad o mentira, sino verificabilidad, como dice un editor de Wikipedia, Ascánder, en una interesante entrevista publicada en La Dinamo (una asoaición/bar/revista de Madrid) (vía Barrapunto):
La Wikipedia no se apoya en los expertos sino en la verificabilidad de la información que contiene.
El problema de la falibilidad, lo tiene tanto Meneame como la Wikipedia (ya comprobado), como cualquier blog (también) como la Espasa Calpe, o cualquier periódico tradicional. Ahora bien, ¿cuáles son los mecanismos precisos de esa falibilidad?
El cambio de ‘paradigma’ en la producción de la información y el conocimiento implica un cambio en el paradigma del consumo. El lector/oyente/televidente/internauta debe adoptar una postura activa, en la que no consume simplemente, sino que contrasta, compara, critica, y busca fuentes alternativas.